El campo andaluz sigue estancado en siglos pasado

 En estas condiciones laborales trabajan en los campos de Lebrija, en la provincia de Sevilla, los jornaleros y jornaleras andaluzas en pleno 2020. 

Bajo unos salarios ridículos, por unas peonadas esclavistas y unas condiciones indignas es como se sigue trabajando en el campo andaluz.

No podemos permitir que las Huerta que da de comer a Europa, siga trabajando en condiciones indignas. El campo andaluz necesita dignidad y justicia social para sus trabajadores y trabajadoras. 

Se mecaniza el campo, aumentan los beneficios de los patronos y empresarios, mientras las condiciones y salarios de los braceros siguen siendo de siglos pasados